viernes, 20 de marzo de 2009

Inconforme

Es cierto que la evolución de los medios ocurrió tan rápido, que fuimos adoptando cada invento con más facilidad de la esperada. Lo práctico se volvió indispensable y entre menos te tardes mejor. Ya no enfocamos la atención al contenido, sino a la velocidad con que éste se propaga.

“Quién lo dice primero”, importa más que “quién lo dice mejor”. Pero, no sólo los medios nos enseñan esto, las prácticas académicas no se queda muy atrás. Por eso al leer sobre la comunicación de masas en el siglo XV comprendí lo diferente que es ahora. ¿Cómo es posible que antes, sin estudios, se podía hacer una mejor investigación que ahora? Que conste que en la actualidad se necesitan más de 300 créditos para considerarte un “Comunicador”.

¿Y de que sirven? Si enseñan de todo pero incompleto, con poco tiempo. Un semestre no basta para aprender a redactar, a editar, a grabar, conducir, hacer un buen guión… no es suficiente. ¿De que me sirven entonces 4 años de estudio si no puedo hacer algo completamente bien?
Pero los maestros se excusan con decirte, “No te quedes con la licenciatura, ve más allá y haz un posgrado, tu maestría”. Así se quitan la culpa de que en un semestre no te pudieron enseñar lo que hubieras querido aprender.

Que quede claro que no estoy culpando sólo a los maestros, también a las nuevas tecnologías que nos volvieron flojos y a nosotros mismos por dejarnos convertir. Es un conjunto de malas “enseñanzas” que en lugar de ayudar están perjudicando.

Comunicación de Masas y Periodismo

No hay comentarios:

Publicar un comentario