viernes, 20 de marzo de 2009

Fuentes

Algunas de las fuentes periodísticas que han tenido impacto en las noticias que escuchamos día con día. Unas más familiares y otras no mucho, pero en fin importantes.

Principales Agencias de Noticias en el Mundo.

Alemania- DPA Fundada en 1949
Francia- AFP
Italia – ANSA
Portugal – LUSA
Reino Unido – Reuters
Estados Unidos – AP Associated Press y UPI United Press International
Argentina – DYN Agencia Diarios y Noticias
Bolivia – JATHA
Brasil – Agencia Estado
México – NOTIMEX
China – XINHUA
Japón – KYODO

¿La más conocida?, Notimex, por la cercanía y la cultura que tenemos acerca de la agencia.

En esta página se encuentra una presentación más detallada acerca de las fuentes periodísticas.
http://www.slideshare.net/my-slideshows?updated=1175231

El acontecimiento como fuente de las noticias

Hay acontecimientos previsible e imprevisibles, pero aún así son considerados acontecimientos. El problema llega cuando una noticia se hace tan popular a pesar de no tener sentido.

Como es el caso del pederasta, el acontecimiento que parecía tener buena trascendencia resulto una mentira. Sin embargo, los medios y el publico se encargaron de que se convirtiera en una gran bola de nieve, sin razón ni justificación, pues todo fue un invento.

Es increíble como podemos caer en las telarañas que nos presentan los medios y volvernos complemento de la misma. Entonces, si según el periodismo surgió para aumentar nuestro conocimiento, ¿resulta que ahora distorsiona información y ni siquiera presta atención a lo que está publicando?

Retos del Periodismo Informativo

La prensa se debe enfrentar con esta realidad, aunque no quiera: “Es imposible ganarle en velocidad a la radio y mucho menos a la televisión”. Aunque esto no quiere decir que sea la muerte de la prensa, gracias a que la televisión y la radio se han vuelto más dinámicos y modernos. No, en realidad no se terminan los periódicos, deben evolucionar, pero no sólo en diferente papel y otro tipo de letra, sino en sus periodistas y colaboradores.

Se necesita un mercado de calidad, de buena circulación que logre la penetración y la buena influencia, ¡que la gente lo pida! Además, es indispensable empezar a utilizar algunas herramientas científicas, como la medición que ayudaría a tomar decisiones. Esto incluye graficas, estadísticas que complementen lo escrito y den mayor credibilidad y veracidad.

Sería bueno regresar a lo básico, en el aspecto de la información. Seguir como vasos comunicantes y no sólo actores, sino verdaderos periodistas. Terminar con la fama de “chismoso” y ser un informador destacado y comprometido con la función que se debe cumplir. Es importante la responsabilidad social, no pertenecer a sólo un grupo social y tener fuertes inclinaciones con tal o cual empresa. Lo importante es informar tal cual son las noticias, porque esos filtros y barreras, posturas políticas y demás sólo deterioran la información.

Ya que le televisión y la radio han ganado el “qué, quién, cuándo y dónde”, la prensa debe hablar del “por qué y cómo”. Porque no basta con decir si sube o no el precio de la tortilla, en realidad eso no nos importa, lo que importa es decir por qué nos afecta y cómo. Profundizar para informar bien a los lectores, porque las noticias en todos lados salen, de algún modo te enteras, pero la conciencia y la creación de tu postura no te la presentan tan seguido.

Incluso los periodistas deben atrapar al lector visualmente, para que continúe leyendo, esta es una excelente competencia a la televisión, radio, e incluso a Internet. Recordar la cultura periodística, enseñar la buena lectura y la buena redacción, de igual forma nos puede ayudar a mantener buenos lectores, a mejorar la calidad de la prensa y la calidad de los que la prefieren. Porque a sabiendas que México es uno de los países que menos lee, si leemos algo mal redactado, la situación no mejora en absoluto.

No esta de más recordar que los periodistas cuentan historias, no sólo los datos sino todo un bagaje cultural, que es lo que les permite dar un buen contexto, lo que les permite utilizar el antecedente adecuado, que les permite desarrollar la mejor jerarquía y el orden de importancia de las cosas.

Es difícil que la presa siga avanzando sin correr el riesgo de desaparecer ante los medios electronicos.

El efecto de la noticia

En enero del 2008 se desató la noticia de que Estados Unidos había entrado en recesión. ¿Qué pensaste? No, no pasa nada, Estados Unidos no puede estar en recesión, ¡es el país más poderoso del mundo! Le diste tiempo al tiempo para que te informaran de lo contrario, de que todo había pasado y fue una falsa alarma.

Pero no era broma. Meses después se empezó a sentir la crisis, nos informaron de la quiebra en los bancos y la pérdida de valor en las residencias americanas. Desempleo, aumento en impuestos, devaluación de nuestra moneda. Nada estable.

Ahora sí, la mayoría corre pidiendo ayuda de empresa en empresa, queriendo trabajar. Deudas bancarias, vendes tu casa, tu coche, ¿qué sigue? Pues trabajar, porque la crisis ‘pa los que no trabajan. El problema es ese, que para muchos no hay trabajo. Sin embargo, cuando comenzó la noticia no hubo mucha alarma, y ahora que un cuarto de mundo se queja, todos lloran.

Lo increíble que informaron se hizo realidad. Ahora lo comentan día y noche, sin descanso, no hay otro tema que no hable de lo mal que estamos. Entonces ahora piensas, “Sí, estamos en el hoyo”. Porque como en los periódicos consume la mayoría de las páginas, en la televisión ahoga los noticieros y en la radio abundan los comentarios, la crisis, ahora sí nos lleva con ella.

¿Te afectan?

Te has puesto a pensar ¿cuántas de tantas noticias que vez y escuchas al día son cercanas a tu realidad?

Porque mientras el televisor o la radio están encendidos, las noticias fluyen y hasta falta tiempo para informarte, y los diarios siguen llenando sus páginas acortando noticias para pegar otras. De todo te informan, de todo.

Ahora, lejos de estar fundamentadas en nuestra experiencia directa del mundo, nuestras imágenes de la realidad social provienen de los medios de comunicación. Porque sabemos tanto de tantas cosas que nuestra mente no piensa en lo que tenemos cerca o lo que es real, sino en lo que pasó en China y en lo que viven los chinos, por ejemplo.

Entonces, te quieres vestir como chino, actuar cono chino, aprender su idioma, su cultura y preparar su comida. Porque están tan avanzados en tecnología y son tan inteligentes y creativos, que hay que ser como ellos. Pero, ¿en que se parece China a México? En la piratería tal vez, sólo en eso.

Gracias a los medios, sus noticias internacionales y culturales, adoptamos formas de pensar, de vestir y de ser. Algo completamente opuesto a lo que en realidad somos, o fuimos.

Inconforme

Es cierto que la evolución de los medios ocurrió tan rápido, que fuimos adoptando cada invento con más facilidad de la esperada. Lo práctico se volvió indispensable y entre menos te tardes mejor. Ya no enfocamos la atención al contenido, sino a la velocidad con que éste se propaga.

“Quién lo dice primero”, importa más que “quién lo dice mejor”. Pero, no sólo los medios nos enseñan esto, las prácticas académicas no se queda muy atrás. Por eso al leer sobre la comunicación de masas en el siglo XV comprendí lo diferente que es ahora. ¿Cómo es posible que antes, sin estudios, se podía hacer una mejor investigación que ahora? Que conste que en la actualidad se necesitan más de 300 créditos para considerarte un “Comunicador”.

¿Y de que sirven? Si enseñan de todo pero incompleto, con poco tiempo. Un semestre no basta para aprender a redactar, a editar, a grabar, conducir, hacer un buen guión… no es suficiente. ¿De que me sirven entonces 4 años de estudio si no puedo hacer algo completamente bien?
Pero los maestros se excusan con decirte, “No te quedes con la licenciatura, ve más allá y haz un posgrado, tu maestría”. Así se quitan la culpa de que en un semestre no te pudieron enseñar lo que hubieras querido aprender.

Que quede claro que no estoy culpando sólo a los maestros, también a las nuevas tecnologías que nos volvieron flojos y a nosotros mismos por dejarnos convertir. Es un conjunto de malas “enseñanzas” que en lugar de ayudar están perjudicando.

Comunicación de Masas y Periodismo

Periodismo Herido

El periodismo herido, nos comenta sobre los cambios que ha tenido la prensa escrita gracias a la informática de la redacción. Ya que gracias a los avances y los nuevos métodos utilizados por los periodistas de hoy, se ha desviado o distorsionado la intención de la buena prensa.

Ahora, los gerentes sólo se interesan por la productividad y han hecho que los lectores crean que lo que producen es pensando en ellos, en lo que se merecen y quieren leer. Aquí entra también la intención del periodista, cuando engaña al público haciendo creer en sus notas que estuvo en el lugar de los hechos, sabiendo que su gran trabajo viene de un “copy paste”.

Además, el 90% de las informaciones se repiten, independientemente del periódico que se trate. Esto lo sabemos, en televisión, radio y prensa siempre se dice lo mismo. Sumándole a esto las inclinaciones de la empresa y las preferencias políticas, esta por demás decir que escuchas lo mismo, pero de diferentes lados.

El amarillismo por su parte, cumple con atraer tontamente a los lectores, porque entre más exagerada la imagen mejor, ya ni hablar de los desnudos, el morbo es tan poderoso, que no importa el texto. Pero ¿qué pasa con los buenos contenidos pero con fotografías sin sentido? Ilógico ¿no?

Lo que parece imponer es la propaganda, vender, vender y vender. Conocer personas importantes, “palancas” que te ayuden a cambio de la preferencia a las mismas, de todas formas de algo se tiene que mantener la prensa, así que “vale”.

Se ha olvidado que es mejor no tener amistades políticas, no practicar el pesebrismo (aceptar y dar regalos), mantenerse objetivos y tomar en cuenta a los lectores, hacer un buen trabajo, merecedor de colocar el nombre en la nota. Así como practicar la investigación profunda sin olvidar que el periodismo es libertad, porque la libertad consiste en plasmar las ideas, no sólo tenerlas.

Para esta libertad sólo se necesita la neutralidad, el buen trabajo, un buen periodista.

Memorando

El memorando de A

Se dice que para ser objetivos, los periodistas deben quedar al margen de la información, sin agregar nada más o dar alguna opinión. Aunque también se dice que “cuando la información parte de un conocimiento exacto y cierto, de una reflexión consciente y de una rectitud intachable de intenciones, es información objetiva”.

Con esta objetividad, se debe tomar en cuenta que un periodista no siempre va a decir las cosas como los demás periodistas, pues cada uno le da un sentido propio al acontecimiento. Por esto, los fundadores del Time comprobaron que era imposible la objetividad absoluta y que sus editores deberían indicar en los asuntos controvertidos cuál de las partes tiene mayor mérito.

Entonces, el periodista puede darle su sentido a la nota, sin olvidar usar de la mejor manera las fuentes oficiales y fiables, bien conocidas y creíbles, así como la cita de testigos oculares. Porque las citas son la protección del reportero contra la calumnia y el libelo, de esta forma se encuentra la veracidad de la representación. Y aunque no ha desaparecido el yo del periodista, está desapareciendo el deber de la objetividad.

Por esto, el ciudadano libre es creación del poder democrático, el dominado es el resultado de una fuerza dominante. Y en la información de ese ciudadano libre, una información libre es tan necesaria como el agua.

domingo, 1 de marzo de 2009

Siempre la censura...

Hace un par de décadas, la prensa escrita se enfrentaba con la censura que le imponía el Estado. No podían escribir sin antes investigar en lo más profundo de sus fuentes, pero no cualquier fuente, sino las más fiables y comprometidas con la verdad. Era un tipo de lucha incansable y cien por ciento veraz.

En la película, “Todos los hombres del presidente” se nos muestra un monumento a la libertad de expresión. Un grupo de colegas se dedica firmemente a abrir el camino a la verdad y luchan con todas sus fuerzas contra la censura que se le pretende imponer.

Es entonces donde me doy cuenta lo difícil que era para los periodistas en aquellos años mantener informados a los lectores. Sin duda, era un trabajo para investigadores perseverantes. Lo que hoy resulta un poco diferente, pero no sólo por lo de “perseverantes” sino por el tipo de censura con la que nos debemos enfrentar.

Ahora no sólo tenemos al Estado y a las políticas de la empresa vigilando sobre nuestros hombros, revisando cada letra que se agrega al texto. No bastó con filtrar unas cuantas palabras, sino con prohibir la nota entera.

Gracias a la violencia, narcotráfico y secuestros, el periodista se mantiene en la línea del miedo, ya no sólo de las “políticas”. Especialmente en México, que no por nada se ha ganado el primer lugar en inseguridad, violencia y muertes hacia reporteros y periodistas.

“Todos los hombres del presidente” me llevó a admirar el trabajo de los reporteros, Bob Woodward y Carl Bernstein, quienes sin duda mostraron la función de un apasionado periodista. Aunque admiraría aun más a algún reportero actual, que se comprometa con cumplir veraz y efectivamente con su profesión, sin miedo a la censura o la violencia que enfrentamos en el país.

Es difícil imaginar hoy a la prensa libre, sin miedo. La crisis que enfrenta México, en todos los aspectos, a llevado a los medios a medio informar, medio investigar y medio opinar acerca de los acontecimientos que hunden cada día más a nuestro país.